El 5 de mayo Mauricio Morán de 14 años fue asesinado por Cristian
Bressant
y otros policías cuando intentaba robar carbón, el combustible de los
pobres. El 25 de agosto, el oficial Bressant compró con 20 mil pesos su
libertad... y acá no ha pasado nada.
En los mismos días de mayo fue asesinado el joven Chandía, Juan Carlos
Oruza, el policía que lo mató, fue premiado con un cargo
administrativo...y
acá no ha pasado nada.
Nosotros y nosotras, como miembros de la comunidad, y como integrantes
de
distintas agrupaciones preocupados por la vida de nuestra gente, solo
sentimos indignación e impotencia. Esto se llama Impunidad....
Día a día, noche a noche decenas de jóvenes y niños circulan pidiendo
monedas, vendiendo, tratando de sobrevivir...y por su condición son
levantados a las patadas de las calles por la policía, condenados como
criminales. Un niño no debe preocuparse porque no tiene para comer,
porque
va a pasar frío o porque la policía lo persigue.
¿Porqué la condena recae sobre desamparados y no sobre los responsables
de
garantizar sus vidas?
La policía cada día es mas agresiva, el gobierno planifica y respalda,
la
justicia libera a los culpables...Cada vez mas violencia.
¿Cuándo los hombre y mujeres mendocinos sufriremos en carne propia la
injusticia de los oprimidos?
-Colectivo Antirepresión-
Casa por la Memoria, Liga por los Derechos del Hombre, Casa por la
expresión
la Cultura y el Arte, Centro de Aprendizaje Comunitario del Bº La
Estanzuela, Martín Fierro (agrup. Estudiantil de Cs. Agrarias),
H.I.J.O.S.
jueves, 31 de agosto de 2006
Que poco vale la vida, si la vida es la de un pobre
Temas:
Interes Social
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