martes, 25 de marzo de 2008

Pruebas contra Rico Tejeiro

El cerco se cierra
Pruebas documentales muestran que Rico Tejeiro llevaba a los presos torturados desde Inteligencia policial hasta la Penitenciaría de Mendoza. Boicot de organismos de derechos humanos a los actos por el golpe, a los que no asistió Jaque.

Un 24 con dos plazas llenas para no olvidar


Por Horacio Verbitsky

La presencia de Carlos Rico Tejeiro en 1976 en la Dirección de Inteligencia de la Policía de Mendoza (D-2) ha dejado de ser sólo un recuerdo de los prisioneros que pasaron por ese centro de detención y torturas: acaban de aparecer documentos con su firma en los que autorizó el retiro del D-2 de tres de esos detenidos, para trasladarlos a la penitenciaría provincial. Ese documento fue agregado por la abogada del Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos, Viviana Beigel, a la denuncia contra el actual subsecretario de seguridad de la provincia, en la que la fiscal María Gloria André pidió al juez federal Walter Bento que lo procesara por su participación en crímenes de lesa humanidad y que acumulara el caso a los que ya están en trámite. Bento hizo lugar a la realización de las pruebas solicitadas por la fiscal. Rico Tejeiro dijo que no piensa renunciar ni hará comentarios hasta que se pronuncie la justicia. Antes había negado haber cumplido funciones en el D-2, cosa que los nuevos documentos desmienten.

La causa madre se caratula “Fiscal c/Daniel Hugo Rabanal y ots. en Av. Infracción Ley 20.840” y en ella se investigan secuestros, torturas, desapariciones y asesinatos, cometidos en Mendoza en febrero de 1976, en la agonía del gobierno de Isabel Martínez de Perón. Las víctimas fueron Miguel Angel Gil, Daniel Rabanal, Mario Muñoz, Marcos Ibáñez, Rodolfo Molina, Guido Actis, Silvia Ontiveros, Estela Ferron, Fernando Rule, Ivonne Larrieu y Vicenta Zárate. Como consecuencia de los tormentos, Gil sufrió una herida en la pierna que se infectó y le produjo una septicemia, de la que murió el 22 de febrero de 1976. Fernando Rule es uno de los sobrevivientes que declaró haber sido secuestrado y torturado en el D-2. El mecanismo establecido implicaba las torturas en el D-2, luego de lo cual los presos eran conducidos por personal policial a la Unidad Regional Primera de la Policía de Mendoza, donde declaraban ante el juez. Luego los mismos policías que los traían desde el D-2 los trasladaban a la Penitenciaría Provincial, donde los alojaban en el pabellón de presos políticos. Según el escrito del MEDH, durante los traslados el grupo de custodia “ejercía todo tipo de actos de violencia física y psicológica, de modo tal de que los detenidos consideraran como posibilidad cierta que serían asesinados durante este trayecto”. Uno de los participantes en esos traslados del D-2 a la Unidad Regional y luego a la Penitenciaría fue Rico Tejeiro, de acuerdo con los documentos aportados a la causa. Rico autoriza con firma y aclaración escritas a mano el traslado de los detenidos Daniel Rabanal, Fernando Rule y Silvia Ontiveros del D-2 a la Penitenciaría provincial. Las fotografías de los presos que forman parte del expediente judicial fueron tomadas en ocasión de los traslados y muestran las consecuencias del maltrato sufrido: rostros desfigurados y úlceras en el cuerpo producto de la picana. Era imposible no advertir el estado en que se encontraban.

La presidente CFK comunicó al gobernador Celso Jaque que suspendía la entrega de una partida de 40 millones de pesos para seguridad a la provincia, mientras Rico Tejeiro siguiera en su cargo. El ex presidente Néstor Kirchner le hizo saber que la designación del comando instruido por Mohamed Ali Seineldín en el secuestro y desaparición de personas será incompatible con la pertenencia al Partido Justicialista una vez reorganizado y con un compromiso expreso de respeto por los derechos humanos. También hablaron con Jaque el jefe de Gabinete de ministros, Alberto Fernández, y el ministro de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos, Aníbal Fernández. El único apoyo que Rico Tejeiro tenía en Buenos Aires era el manipulador Juan Carlos Mazzón. Pero también él por orden de Kirchner se comunicó con Jaque para informarle que no podía conservar al funcionario acusado de gravísimos crímenes.

Jaque arguye que si releva a Rico renunciará también el ministro de Seguridad, Juan Carlos Aguinaga, del conservador partido Demócrata, con el que cogobierna. Aguinaga obtuvo casi el 10 por ciento de los votos como candidato a vicegobernador. Jaque decidió salir de Mendoza, por temor al repudio público durante los actos conmemorativos del 24 de marzo, lo cual profundiza la crisis política.

Varios organismos provinciales de derechos humanos decidieron boicotear el acto oficial de ayer, consistente en el descubrimiento de una plaqueta con los nombres de los detenidos-desaparecidos mendocinos en la explanada de la Casa de Gobierno.

“Como familiares de desaparecidos, hemos decidido no estar. No es nuestro lugar, porque entendemos que busca cerrar una contradicción irresuelta y nos está invitando un gobernador que no nos escucha, nos esquiva y apoya a gente que está cuestionada a nivel provincial y nacional”, explicó la dirigente Marilú Carrera. HIJOS planeaba escrachar al gobernador, pero ante su anunciada ausencia, decidió no asistir tampoco a la ceremonia. En cambio el Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos, denunciante judicial de Rico, mantuvo la decisión de asistir, porque la iniciativa de la plaqueta surgió de los organismos, pero celebró la ausencia del gobernador. Hoy realizarán una marcha los organismos provinciales de derechos humanos, a la que tampoco asistirá Jaque. En su lugar estará el vicegobernador Christian Racconto. Jaque mantendrá la distancia por varios días más. Mañana viajará a Chile.

No hay comentarios.: